Otra de las vertientes por las que pasa este cambio de modelo económico en el que nos encontramos son las energías.
El uso y dependencia del petróleo como clave del abastecimiento de energía debe ser sustituido por energías renovables que, a pesar de llevar implícito un mayor gasto de implementación y puesta en marcha inicial, se amortizan más rápidamente llegando a ser más baratas a largo plazo y, por supuesto, mucho menos contaminantes y dañinas para el medio ambiente.
Pero las energías renovables también serán la piedra angular de los negocios futuros porque desde diferentes gobiernos y organismos públicos se subvencionan ya a las empresas que producen e investigan sobre este nuevo mercado.
Pero además de este aspecto, las grandes empresas de renovables, como GAMESA o IBERDROLA RENOVABLES, cotizan en bolsa y forman parte del IBEX 35 y generan las expectativas sobre su futuro crecimiento y la revalorización de sus acciones.
Existen también pequeñas empresas que colocan paneles solares sobre sus tejados denominados “huertos solares” pero en la actualidad no hay reinversión ya que los pequeños beneficios que, eventualmente pudieran ir obteniéndose se dedican a pagar el crédito concedido por la entidad financiera u organismo público.
En aproximadamente diez años, la inversión se recupera porque las compañías eléctricas tienen que comprar la electricidad de renovables durante 25 años. De esta manera quedan 15 años de beneficio íntegro para el inversor.
Entre las empresas que ofrecen invertir en energía solar se acostumbra a juntar a un mínimo de diez inversores que aportarían una cantidad de dinero considerable para construir un “huerto solar”.
Pero este tipo de asociaciones conlleva riesgos ya que la ley que regula las energías renovables en la actualidad y las tarifas vigentes, es muy cambiante debido a la reciente implantación en el consciente colectivo, de la necesidad de migrar hacia este tipo de energías para abastecernos.
Actualmente para pequeños inversores que quieran invertir en energías renovables, lo más interesante y menos arriesgado es hacerlo a través de Gamesa o Iberdrola que ofrecen más garantías y que pueden estudiar la evolución tanto desde la perspectiva de su dinámica bursátil a corto plazo, como una aproximación a largo plazo que, de momento, da buenas perspectivas de solvencia y rentabilidad.
Originally posted 2009-04-30 18:58:30.